Resucitar con aviones

amanecer   He visto amanecer con tres aviones en la misma línea, quizá en la misma ruta. El sol recién resucitado permite ver los hilos que han tejido las arañas. Durante el día son invisibles. Esos hilitos son como las supercuerdas de las teorías que nos hemos dado en estas décadas para interpretar el mundo. .. O que el mundo nos interprete a nosotros. .. En la foto del móvil solo salen dos aviones, pero en el cielo había tres, como un pespunte (hilvanados, acaso los aviones y sus rayas blancas cosen y sujetan el cielo). .. Cómo no pensar en el copiloto y sus víctimas, en el último avión caído. Tres aviones que funcionan ahí arriba. Vidas aéreas, vida eólica en la mañana del domingo de resurrección. .. En la foto, como suele ocurrir, sale un reflejo casual que evoca la década gloriosa de los ovnis. Una mota de sol. Un eclipse diminuto bailando entre los hilos de las arañas. .. El amanecer entraña siempre una resurrección, palabra difícil, con muchas erres. Por muy tortuosa que haya sido la noche, llena de temblores y fantasmas, el nuevo día promete que todo es posible o ya fue posible. .. Tal vez las supercuerdas sean los pensamientos que dejamos al pasar, visibles solo al trasluz. Frágiles y eternos hilitos de las vidas, el cosmos y el bamboleo de los átomos. Han reiniciado el acelerador de partículas del CERN, la máquina prodigiosa de certificar mundos. .. Este texto pensumístico se está haciendo/deshaciendo como esos hilos que nos traspasamos, amor, esperanza, aspiraciones, insomnios, dudas, resurrección matinal de cada persona en los mundos inverosímiles en los que coinciden vida y azares, vidas y vídeos. ___ ___ Qué es todo esto. La vida quizá. Cuatro personas de una familia hablan de un tema poco habitual, de después de la muerte. La reencarnación, el alma, el juicio final, esas cosas. Es una conversación breve, interrumpida por las cosas del día, idas y venidas. Un Sábado Santo (Jesucristo muerto, si es posible tal cosa) con sol y un poco de aire (quizá esto fue ayer, o ya hace dos días, tres días, n días). Al sol se está bien. Hay que hacer la cena. Ir y venir. Las vidas en sus diferentes edades y ciclos. Los que van y los que vienen. Lo que haya después. Las verbenas y fiestas. Sí, hay fiestas en Sábado Santo. Tradiciones revividas: la fiesta de los quintos (cuando ya no hay quintos), que plantan un mallo (un tronco de chopo) en medio de la plaza del pueblo. Los que estudian a Kant y a Marx, que entran en la Selectividad. El incesante guasap que vertebra el mundo.   … …   Por esos campos planean las golondrinas. Las cosechas se mecen con la brisa. Jesucristo está muerto, un día un poco vacío, como todos, angustiosamente llenos de preguntas que rara vez se pronuncian pero que siempre laten y percuten. Qué sea esto, la conciencia activada siempre, la autorreflexión, las otras vidas que llegan por guasap. ¿Somos más conscientes de los demás por el guasap?   …   Los cerebros como máquinas que nunca descansan. O mueren.   …   De la forma más natural, se habla un poco del alma, que permanece tras la muerte, que es invisible, etc. Qué seamos. Que seamos.   …   El alma al sol de Sábado Santo, la velocidad de los días, los temores, insomnios, esperanzas y aflicciones. Se habla del avión de Lufthansa, del copiloto suicida. Google, como siempre, lo sabía todo: sabía lo que iba a pasar, lo que había buscado Andreas Lubitz. El algoritmo necesita aún la mano humana, pero pronto podrá actuar solo, como los coches sin conductor. (El algoritmo de trading se alteró cuando una compañía hizo una broma del 1 de abril anunciando un nuevo producto y la cotización subió de repente.) .. Del avión de Lufthansa y de la masacre de Kenia, 147 cristianos asesinados. Casi tantas víctimas como en el avión que tiró Lubitz. El horror por todas partes. La amenaza en casa y lejos de casa. Vuelve el martirio. Los de la yihad, con sus asesinatos de márquetin, quieren revivir o resucitar el cristianismo, que ya no significa nada pues ha sido abducido y desmontado. Hay fe, aunque sea estacional, pero no hay cristianismo. Hay iglesia, especialmente porque la resucita el Papa Francisco -la Iglesia es ahora unas duchas para los pobres de Roma, quizá más de lo que ha sido en siglos-, pero al Papa no le siguen el ejemplo en otras parroquias. Duchas. .. Éxito y resurgir de las procesiones, no sólo como reclamo turístico, aunque también. Éxito de espiritualidad. Cuando ya no es obligatoria, vuelve la fe, condensada en unos pocos días. En las iglesias, en el culto habitual, hay una media de edad de setenta años; hay curas rurales que ya han rebasado esa edad y atienden a cinco pueblos, con el coche zumbando todo el día. En Semana Santa vuelve la fe, comprimida en unos pocos días, expresada sin remilgos ni vacilaciones. Azaroso vaivén de las creencias, de cosas que nos desbordan y que no entendemos. Dolores, pastillas, exámenes, aflicciones, hacienda, futuros, derivados. En manos de un algoritmo que no hemos sabido descifrar, todavía. En manos de una fórmula breve e infinita. Andreas googleando la palabra prohibida, el tabú, lo que apenas se nombra porque está por todas partes. Qué sea el día. Ha amanecido un poco, tres aviones cosen esa ilusión azul que llamamos cielo. ___ ___ Y la película de Jim Jarmush «Hombre muerto», que nos lleva a William Blake, a Juan Rulfo y a cualquier momento de la postvida que siempre forma parte de la vida. La peli está entera en Youtube, también subtitulada.

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